Haré que estas palabras
dejen de ser cenizas aventadas,
que cuando me miras,
se hagan golondrinas
anidadas entre mis pliegues,
aledaños del silencio,
permitan ser seducidas,
encerradas en la exacta
dimensión de tu alma.
Eso es. mi vida,
escribirte un poema,
que tenga la forma
de un tenue suspiro,
que llene al aire
de tu aroma de hembra.
Reír con la carcajada
naranja del alba,
hablar con el tenue
silabeo de la lluvia,
llorar con la profunda
sinceridad de la guitarra,
vociferar con la honesta
cordura de la cigarra
Eso es lo que anhela
este corazón tan loco
que quiere ser tu poeta.
(José M. Huete Garcia. Mayo 2013)
D.A.R.