CAUTIVO
Amor,
no pienses que es irremediable mi locura
ni que mi soledad me hace vivir un tiempo ilusorio,
si te digo,
con la contundencia de la certeza bien probada
que te he visto esta mañana
asomada a mi ventana,
que era tu mirada de soles encendidos
la que pintaba el cielo de un azul pleno,
que de rojo coloreaba los claveles extenuado de deseo,
que de tus labios me traían el vívido recuerdo
de los besos que nos dimos
cuando en un espasmo del tiempo nos unimos,
que esas pequeñas nubes blancas
que en el horizonte se desperezaban
era tu cuerpo voluptuoso, cuando entre mis sábanas
a amarte me invitaba,
que esa incansable ondulación del mar
en olas reventadas de espumas,
eran tus indómitas caderas,
cuando en irrefrenable cadencia
al éxtasis te aproximabas.
Amor,
no pienses que esta realidad que vivo
amarrado a este silencio,
en que al ocaso, de ser espera redimo,
solo es desgarrada demencia,
de un poeta de sus sueños cautivo,
de ese estremecimiento del alma,
en que a borbotones te revivo.
Es lo que me dejaste como destino
tejer la soga de mi nostalgia...
¡Y ahorcaren con ella tan lentamente,
como lento es el camino infinito del olvido!.
(José M. Huete García, Agosto 2012)
http://jmhuete66.blogspot.com
Qué magnífico poema nos traes,querida Flor...el amor en todas sus formas; en la distancia, en el olvido, en el desamor o en la más próspera expresión, es tan intenso, que de su latir pueden brotar palabras y gemidos,o clamores inacabables...Siempre siempre habrá algo que decir acerca de él.
ResponderEliminarABRAZOS GRANDES, DESDE CHILE.
Hola, Flor: De acuerdo en todo con las palabras de maritza; un poema bellísimo. Un beso
ResponderEliminarMinha querida Flor
ResponderEliminarPassando para ler este poema maravilhoso e deixar um beijinho com saudades.
Sonhadora
Un poema precioso, gracias por compartir.
ResponderEliminarque tengas una buena semana.
recibe un abrazo.