Piececitos de niño,
azulosos de frío,
¡cómo os ven y no os cubren,
Dios mío!
¡Piececitos heridos
por los guijarros todos,
ultrajados de nieves
y lodos!
El hombre ciego ignora
que por donde pasáis,
una flor de luz viva
dejáis;
que allí donde ponéis
la plantita sangrante,
el nardo nace más
fragante.
Sed, puesto que marcháis
por los caminos rectos,
heroicos como sois
perfectos.
Piececitos de niño,
dos joyitas sufrientes,
¡cómo pasan sin veros
las gentes!
Estos versos tan tiernos de Gabriela Mistral se los dedico a todos los niños que estan sufriendo en Japón.
Grande Gabriela Mistral.
ResponderEliminarGracias por compartir.
Besiños Flor
Me uno a tu deseo de que esos piececitos de niño sepan seguir adelante en medio de la pena.
ResponderEliminarBesitos, Flor
Querida Flor: Has hecho un hermoso homenaje a nuestra gran poetisa nacional Gabriela Mistral, y a través de sus versos SIEMPRE tan humanitarios, poder dejarles a los niños una gotita de esperanza en este mundo tan maltratado, a donde ellos no pidieron venir...
ResponderEliminarOjalá cada niño pudiera escucharlos y sentir algo de restauración de alma.
POR ELLOS EN ESTE DÍA: ARRIBA ESOS BRAZOS Y MUCHA FUERZA AL PUEBLO JAPONÉS.
Bonita homenagem.
ResponderEliminarBeijo.
Bello, poema.. me uno a tus pies pequeños..
ResponderEliminarUn abrazo
Saludos fraternos....
Que disfrutes del fin de semana..
Unida al ruego del mundo entero.
ResponderEliminarGran homenaje.
Un abrazo al pueblo Japonés.
Mi saludo querida,desde el mar.Liliana