EL Lavatorio de pies y la Cena del Señor
21-04-2011, Jueves Santo
16:00, CATEDRAL SÉ
Antes de la Misa de la Cena del Señor, el arzobispo que preside lava los pies dedoce personas que representan a los doce Apóstoles. Así se conmemora lo que Jesús hizo y nos tiene presente su lección de vida: "Antes de la fiesta de Pascua, Jesús sabía que había llegado el momento de pasar de este mundo al de su Padre,habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el extremo.[...] Jesús "se levantó de la mesa, se quitó el manto, tomó una toalla y se la ciñó. Después de lavarles los pies [...], les dijo: « ¿Habéis entendido lo que os he hecho? Vosotros me llamáis Maestro y Señor, y decís bien porque lo soy. Si yo, el Maestro y el Señor, os he lavado los pies, también vosotros debéis lavaros los pies unos a otros. Os he dado el ejemplo, para que así como yo lo hice, vosotros también lo hagáis "(Jn 13, 1-15).
Una vez terminado este acto sigue la Misa de la Cena del Señor. Esta es una celebración donde reina el sentimiento del amor de Cristo quien, en la víspera de su pasión, mientras comía la Cena con sus discípulos, instituyó el Sacrificio-Sacramento de la Eucaristía como perpetua de su muerte y resurrección para celebrar, transformándolo en presente en el transcurso del tiempo: "Durante la cena, tomó el pan, diciendo: -" Tomad y comed. Este es mi cuerpo entregado por vosotros. "Asimismo también la copa, dio gracias y se los dio diciendo: - «¡Comed y bebed todos. Este es el cáliz de mi sangre, la sangre de la alianza nueva y eterna que es derramada por vosotros y por todos para el perdón de los pecados. Haced esto en memoria mía "(Lc 22, 19-20).
En el momento apropiado, el que presidente la celebración realiza la homilía adecuada, centrándose en la lección de lavado de los pies y en el "mandamiento nuevo" dejado por Jesús como testimonio espiritual a sus discípulos (el Sermón del Mandato). "Os doy un mandamiento nuevo: Amaos los unos a los otros. [...] Eso es lo que conoceréis todos que sois mis discípulos, si os améis los unos a los otros como yo os he amado "(Jn 13, 34-35).
Después de la misa, la asamblea canta la hora de Vísperas, mientras que Cristo vivo consagrado en la Hostia es llevado por las naves de la catedral a un lugar de culto donde permanecerá hasta que sea retirado, también en procesión al día siguiente para el sepulcro. Se invita a los fieles a velar con él en la hora de su Pasión. En señal de luto el altar es despojado.
Durante la tarde, mientras se invita a los fieles a visitar las siete iglesias, que representan las siete estaciones de Roma (Sé Primaz, Misericórdia, Santa Cruz, Terceiros, Salvador, Penha e Conceição / Mons. Airosa), los farricocos, recorren la ciudad con su ruidosas carracas. En la antigüedad pagana, éstos eran un grupo de personas enmascaradas que anunciaban el pasaje de los condenados y relataban sus crímenes. Una vez "cristianizados" en la antigüedad, conforme al pensamiento de esa época, recorrían las calles llamando a los pecadores públicos a su reincorporación a la Iglesia después de estar arrepentidos y perdonados. Era la forma de pensar de esa época para comprender la misericordia de los pecadores a los que se había aplicado a la indulgencia o "endoenças". En la actualidad este tiene otro significado, de llamamiento a los Hermanos de la Misericordia para la procesión de la noche.
Excelnte etrada Florcita, no sabía que fueras tan creyente. En estas fechas ha caído como anillo al dedo tu post. Un gran abrazo
ResponderEliminarFelices pascuas..
ResponderEliminarUn abrazo
Saludos fraternos..
Que disfrutes la semana.. mis mejores deseos...
Muy hermosa entrada
ResponderEliminarun beso corazon