El mar al anochecer
con su vestido dorado
de la espuma en la playa
se deja ir lentamente.
La luna mira el paisaje
como notando tu auséncia
en el romper monótono de las olas
y en el blanco de las conchas.
Sólo en la arena, lloro tu auséncia
mientras siento la mirada de la luna
de las olas y las conchas
totalmente indiferente.F.Puigcarbó
A veces necesitamos de la soledad para reflexionar y llenar el alma de paz.
ResponderEliminarque tengas una bonita semana.
un abrazo.
Me ha gustado mucho el cuadro, realmente es así el atardecer en la playa, donde quedan algunas silla y hamacas hasat que les sorprende la noche.Un beso, Flor.
ResponderEliminargracias por publicar el poema, en el post último no se pueden dejar comentarios.
ResponderEliminarMinha querida
ResponderEliminarHoje passando para agradecer a amizade de sempre e deixar um beijinho...tenho um miminho no lado direito do meu blogue.
Beijinhos
Rosa
En la soledad y tranquilidad de ese anochecer en la playa.
ResponderEliminarSaludos amiga flor.