Esta tarde vi llover...

Querida Amiga

Ayer, al principio de la tarde me senté en el patio de mi casa y empecé a escribirte, hace días que quería hacerlo.

Quería contarte algo que me pasó y que me dejó muy feliz. Pero mientras empezaba a escribirte tocaba el teléfono, me volvía a sentar, después alguien toco el timbre, fui a ver quién era , era un amigo muy querido que ya no lo veía hace tiempo, pasó para decirme que volvería en la noche para cenar conmigo, en mi casa. Imagínate como me quedé…Ya no te escribí y estoy empezando de nuevo hoy porque lo que había empezado a escribir, ya no me gusta.

Te cuento:

Como el tiempo estaba bueno no hacía mucho frio puse la mesa en el patio donde estoy a escribirte ahora.

Sabes lo que preparé para la cena? Intenté hacer una nueva receta de pescado porque eso era lo que tenía en la nevera lista para ser cocinada.

MERLUZA EN PAPILLOTE: primero salgué la merluza, bella merluza de Vigo que había comprado en esa mañana. Y que hice? Pues la hice al horno pero de una forma distinta la hice en papillote. Fue un éxito!!

Cada trozo de merluza la coloqué en un cuadrado de papel vegetal, por encima de una rodaja de tomate, de seguida otra rodaja de tomate media cebolla cortada muy fina, unas hojas de perejil, la rocié con un poco de aceite de oliva, cerré el papel como si de un caramelo se tratara. Llevé al horno ya caliente durante 20 minutos. En la mesa y ya en el plato abrimos el papillote y me quedé tan contenta porque el olor era tan bueno y el sabor, fantástico y él quedó encantado, porque le gusta mucho pescado y comerlo de esta manera fue una sorpresa.

Para postre solo tenía fruta, pero él como buen caballero me hizo la sorpresa y trajo un STRUDEL DE MANZANA, que fue solo meterlo al horno unos minutos y ya estaba listo. Comerlo tibio con una copa de champán helada fue una delicia. Y nos quedamos allí conversando, siempre que estamos los dos hablamos de todo lo que nos viene a la cabeza, ya sabes como él es muy buen conversador y las horas fueron pasando y no nos dimos cuenta que el tiempo estaba cambiando y de repente empezó a llover a cantaros, la puerta se cerró, no la conseguíamos abrir, menos mal que estaba por allí un paraguas y casi no nos mojamos, nos reíamos como locos y por fin la puerta se abrió de repente. De seguida hice un café bien fuerte y él preparo un Irish Coffee. Seguimos conversando…Los malentendidos que hubo entre nosotros, como sabes, hablamos sobre eso y todo se quedó bien esclarecido. Llegó la hora de irse y me prometió que la próxima cena sería en su casa, me reí y pensé cuando sería que yo podría viajar hasta allá, pero le dije que sí, quién sabe????

Ah! Sabes que me dijo? Que me iba hacer una sopresa para mi cumpleaños... Que será??

Fíjate que empecé esta carta para contarte algo que ya me olvidé, estoy segura que no tenía tanta importancia como la visita de mi amigo. Cuando me acuerde de lo que se trataba te envío un MSN.

Intenta hacer esta receta de merluza, es fantástica!

Besos y muchos cariños

Flor