Erase una vez...

Erase una vez…

Al principio de la tarde se oyó un grito en el bosque!!

Todos los animalitos empezaron a correr asustados de un lado para el otro, saltando y preguntándose lo que había pasado. Pasaban por entre las florecitas y las pobrecitas no sabían que hacer solo lloraban, lloraban…

Dos horas más tarde ya el sol iba lejos, llegó una paloma blanca muy linda acompañada por un rayo de luz tan intenso, que no fue necesario dar órdenes para que se detuvieran en su locura momentánea. Todos pararon y de ahí a algunos minutos, las florecitas empezaron a llorar de alegría y con sus vocecitas llenas de ternura les comunicaba a todos la noticia que la paloma les había traído:

“Os quiero decir queridos amigos y compañeros del bosque, que nuestra hermanita Orquídea ya está más tranquila porque lo peor ya pasó. Le van hacer un tratamiento y los médicos le han dicho que en pocos días quedará mucho mejor”.

Fue un espectáculo lo que se armó! Ya no hubo descanso en el final de la tarde. Empezaron a entrenar las voces para cantar aquella canción que tanto le gustaba a Orquídea.

Llegó el jardinero y se junto a la fiesta, dio un poco de cariño a las florecillas como él llamaba a las hermanas y primas de Orquídea.

El Orquídario quedó precioso ¡

Cuando ella llegó todos le dieron la bienvenida, y cantaron no una, pero todas las canciones que ya habían entrenado antes. Todos bailaron y bailaron noche adentro.

Orquídea se sintió muy feliz!

Que bueno tener tan buenos amigos!

Tuve un susto

pero rápido paso

Os quiero mucho!

(Haiku de Flor)